Soy de Murra, Nueva Segovia Nicaragua hace más de 20 años que emprendí mi viaje al Sur hacia la Capital una manera que al final a mí mismo no deja de sorprenderme, yo chavalo trabaje cortando café, ordeñando vacas, sembrando hortalizas, y hasta cargando los camiones de frijoles, un día allá por 1996 en mi pueblo llegaron unos hombres con el famoso juego donde quedó la bolita con tres tapitas de zepol, entonces a muchos en mi pueblo les ganaron la puesta y era al mil por cien, entonces yo decidí probar mi suerte y mi susto que le ganó la partida y me pagaron a la brava pues no querían, entonces con ese dinero quería conocer más allá de Ocotal y Jalapa que era los dos únicos lugares que conocía.

A mis escasos 17 años, entonces a eso de las 4 am miro que viene el bus que viaja hacia Ocotal entonces alisto los 50 pesos que valía el pasaje y emprendo un viaje que mi mama me dijo bueno hijo suerte pero cualquier cosa allá en Managua anda busca la radio ya, eso era una referencia ir a pedir ayuda en caso de perderse en la capital, ya tanda en Ocotal agarro el bus hacia Managua a 4 horas de camino conocí Estelí, Sabaco y señores a las 12 del media estaba entrando a Managua logre ver el Aeropuerto y de la emoción el bus hace una parada en la subasta, ahí me baje y me hospede en el hotelito flores, y me sentía extranjero en mi país, ver los carros, y la cantidad de gente, a eso de las 4 de la tarde me aventure y me monte en la ruta 105 quería conocer la rotonda de Bello Horizonte ya que mucho había oído en mi pueblo, ya de nuevo volví a tomar el mismo bus y estando ahí al día siguiente busque trabajo y andaba de suerte el mismo sr me dio trabajo haciendo las compras en el Mercado Mayoreo, ya me ganaba mi comida y la dormida y aun tenía como 800 córdobas, ayudaba a montar las maletas a los buses y taxis y así recibía propina con la que me compraba ropa.

En eso conozco a un sr que era hurgonero y tome una decisión alocada  y era irme con él hacia Guatemala, ahí en tres día estaba en la mera Guatemala el mismo me oriento como cruzar hacia México, y emprendí un viaje largo e incierto, al cabo de 20 días de aventón en aventón logre llegar a Tamaulipas y de ahí me recuerdo era fácil cruzar la frontera, ya en Laredo empezó a trabajar en una granja y después en una bodega de Pepsi cola, empezó ganando a 5 dólares la hora, al plazo de 3 años ya sabía manejar camiones de 20 toneladas y con algunas amistades logre conseguir un permiso y licencia allá por 1998 me dan mi primer viaje hacia Los Ángeles, un viaje de 2 días por los grandes firewall y empiezo a ver qué tan grande era Estados Unidos, me gusto ganar dinero haciendo viajes largos, ya en el año 2000 logre arreglar mi situación legal pues me case con una Nica, de León y tuvimos tres hijas, ninguna habla español, después de 20 años que Salí de pueblo tome la gran decisión de volver a Nicaragua.

Asi comienzo un viaje lleno de grandes emociones, y al llegar al Aeropuerto Augusto Cesar Sandino de Managua mi sorpresa es ver el grandísimo cambio que tuvo totalmente remodelado me sentí tan emocionado por ver como mi linda Nicaragua tan dando grandes pasos, pero el momento más duro fue ver a mis familia esperándome pues mi esposa les había llamado y se me salieron las lágrimas de lo más profundo de mi corazón al ver a mi madre llorando de emoción, ya con más de 71 años lo primero que me dijo es que Dios le cumplió el sueño de volver a verme, ya ahora miro todos mis primos que era unos cipotes, son hombres y con familia, entonces me decido rentar un carro a pocos metros de la carretera me recuerdo mi primera vez que vi este Aeropuerto fue algo que me dio nostalgia pues en ese momento miro que ahora los buses son modernos con aire y de lujo, pues en aquel entonces eran buses amarillos con canastera en la parte de arriba, pero quería darle algo mejor a mi madre, y decidí rentar un Microbús de 16 pasajeros pues eran  como 20 personas, pero decido darle una sorpresa y era que le iba mostrar los lugares más bellos de Nicaragua, y visitamos Granada, Masaya, los pueblos blancos, hasta San Juan del Sur, después la lleve a conocer la Isla de Ometepe, y me sentí orgulloso de ser Nicaragüense pues tenemos un país Lindo y hermoso lleno de gente trabajadora y amable con una sonrisa única, después de tres de conocer los mejores destinos del pacifico del Nicaragua, emprendimos que conociera la Capital, y ver la Carretera Masaya me dio una gran alegría ver tanto desarrollo pues eso crea trabajo y así muchos no emigramos, pues es duro iniciar una vida en el extranjero, después la lleve a conocer la Avenida Bolívar pues ella allá en Murra solo por la televisión la miraba y llegando casi al final por el Teatro Rubén Dario, nos encontramos con el Puerto Salvador Allende algo totalmente nuevo para mí ver algo tan bien organizado y con un crucero para recorrer el Lago de Managua, después emprendemos el lago viaje a mi pueblo y miro lo maravilloso que ahora las carreteras están súper bien cuidadas, en poco más de 6 horas logramos llegar, y una de mis tías me recibe con algo súper rico un atol de pujagua bien caliente, me saco las lágrimas pues esto no tiene precio volver a lugar de donde yo nací, ver como ahora hay telefonía celular, mayor comercio y más fuente de empleo eso hace que muchos logren formar una familia y no emigren pues mi historia la comparto para que ustedes sepan que en Nicaragua hay muchas oportunidades, son otros tiempos y hay una gran posibilidad de desarrollan un buen futuro porque hay más inversión y eso crea trabajo y es algo lindo ver como país dio un giro  grande pues ahora me siento con ganas de quedarme porque mi tierra siempre va ser el mejor lugar para vivir.